El despido de Christian Horner marca el fin de una era en Red Bull

Parece que el drama no termina para la escudería Red Bull. Después de 20 años al mando y siendo clave en el éxito del equipo, Christian Horner fue despedido con efecto inmediato. La decisión tomó por sorpresa a muchos en el mundo de la Fórmula 1, dejando el panorama abierto para especulaciones sobre el futuro rendimiento del equipo.

La gota que rebalsó el vaso fue una denuncia de comportamiento inapropiado conocida como el "sexgate", aunque Horner negó las acusaciones. Estos problemas de imagen y otras tensiones internas, sumados a rumores sobre la posible salida de Max Verstappen, complicaron su permanencia.

A pesar de su salida, el legado de Horner en Red Bull es innegable. Logró 14 títulos y 124 carreras ganadas, consolidando a Red Bull como un gigante en la Fórmula 1. Oliver Mintzlaff, director general de Red Bull, reconoció la contribución excepcional de Horner al equipo.

Laurent Mekies, proveniente de Visa Cash App Racing Bulls y con experiencia en Ferrari, será el encargado de suceder a Horner. Su tarea no será fácil: deberá mantener al equipo en la cima y asegurar la permanencia de Verstappen. Además, deberá enfrentarse al reto de mejorar el rendimiento del equipo, que ha caído en las últimas carreras.