Cristina Kirchner recibió al expresidente de Brasil Lula Da Silva en la prisión domiciliaria
El encuentro entre Cristina Kirchner y el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, se llevó a cabo en el departamento donde ella cumple su arresto domiciliario. Lula, quien participó previamente en la cumbre del Mercosur, gestionó un permiso especial para poder visitar a la expresidenta argentina. Este permiso fue solicitado formalmente por su abogado, Carlos Alberto Beraldi, ante el tribunal federal.
La aprobación judicial para la visita establece que debía mantenerse la tranquilidad en el barrio, una preocupación derivada de pasados incidentes con manifestaciones a favor de Cristina. A pesar de las condiciones, la reunión continuó como estaba programada y una vez finalizada, Lula partiría nuevamente hacia Brasil según su agenda oficial.
En Brasil, la decisión de Lula de visitar a Cristina causó bastante revuelo. Algunos dentro del gobierno apoyaron el gesto al verlo como un acto de reciprocidad por el apoyo que Lula recibió cuando enfrentó su propio proceso judicial. Sin embargo, otros advirtieron que el viaje podría verse como una provocación política o cuestionar la independencia judicial en Argentina.
